El Instituto de Investigación Sanitaria Bioaraba participa en el desarrollo de un entrenador virtual para mejorar la independencia de las personas mayores

Profesionales de Osakidetza, concretamente del Instituto de Investigación Sanitaria Bioaraba, Osatek y del Servicio Público de Teleasistencia-betiON participan en un ambicioso proyecto europeo denominado EMPATHIC, coordinado por el grupo de investigación Speech Interactive Research Group de la Facultad de Ciencia y Tecnología de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU). El proyecto tendrá una duración de tres años. La intención del equipo es tener el primer prototipo en mayo de 2019 y contar con el asistente virtual finalizado en el último trimestre de 2020.

En dicho trabajo participan varios organismos europeos y su ejecución es posible gracias al programa de Investigación e Innovación de EU Horizonte 2020 de la Comisión Europea. EMPATHIC tiene como objetivo el desarrollo de un asistente o coach virtual para personas mayores. Además de recordar a las personas mayores las tareas o actividades que pueden realizar, este asistente será capaz de detectar cambios en el estado emocional de las personas a través de alteraciones en el tono de voz o en los gestos de la cara, y podrá actuar en consecuencia de forma totalmente automática.

“Su propuesta consiste en diseñar y desarrollar un asistente o coach de salud, totalmente autónomo, que interactúe con las personas mayores, y les ayude a mantener una vida independiente, en los tres pilares principales: la alimentación, la vida social y el ejercicio físico”, explica María Inés Torres, líder del grupo de investigación y del proyecto, quien añade que el producto final que quieren conseguir será “un avatar, que funcione en tablets, televisores, ordenadores, teléfonos móviles, etc., que mediante sensores, micrófonos y cámaras, pueda mantener diálogos con las personas usuarias”.

Pero más allá de funcionar como recordatorio, la interacción permitirá al sistema detectar cambios en la conducta de las personas, así como cambios en su estado de ánimo, mediante la detección de cambios en el tono de voz, en la expresión e incluso en el ojo. “Cuando haya percibido estos cambios, responderá de la misma forma que lo haría un coach, y mediante el diálogo, intentará corregir esa situación”, detalla la investigadora. "Si el sistema detectara, por ejemplo, que la persona no ha salido de casa en los últimos días, podría sugerirle hacer alguna actividad de su gusto, como ir a un concierto, y para ello llamar a alguna amistad y coger las entradas”.

El papel de Osakidetza

La conjunción de disciplinas que participarán en el proyecto incluye a profesionales de la Medicina y la Psicología, a ingenieros y tecnólogos de muy diversa índole, así como a varios grupos de usuarios finales, con quienes se contará desde el principio para testear y validar todo lo que se vaya avanzando.

En este contexto, el papel de Osakidetza es muy importante por su aporte de conocimiento. Así, profesionales de Osatek aportarán la experiencia adquirida a lo largo de seis años de gestión y el Servicio Público de Teleasistencia betiON y profesionales de Osakidetza proporcionarán conocimiento sobre las necesidades en salud de las personas mayores.

En la parte tecnológica, por otro lado, se desarrollarán tecnologías y sistemas para responder a todas las funciones que quieren que tenga el asistente. Entre otras, estas serán las tecnologías: el avatar interactuará con las personas, reconocerá de forma automática el habla, sintetizará la voz y los sistemas de diálogo y tendrá sistemas para detectar cambios emocionales a través de la señal de voz. También destaca el reconocimiento facial y la detección de los cambios emocionales en la expresión de la cara, la detección de cambios emocionales en el ojo y la tarea de traducir los objetivos de salud a modelos matemáticos para hacer funcionar la tecnología.

Por último, se crearán tres grupos con personas voluntarias a las que va dirigido el producto, para que evalúen los avances: uno de gente mayor que acude a diferentes tipos de cursos, otro de personas usuarias de servicios de teleasistencia, y un último grupo de pacientes seleccionado por los facultativos médicos.

Estos grupos provendrán tanto de personas usuarias y colaboradoras de distintos servicios de Osakidetza-Osatek, como de una asociación francesa de personas mayores y de la selección que realice la Universidad de Oslo. Todos ellos seguirán unos criterios de selección similares, para así poder testear el sistema en contextos lingüísticos y culturales diferentes.

Listado completo de participantes

El consorcio creado para llevar a cabo el proyecto EMPATHIC reúne a diez entidades europeas: los anteriormente citados grupo de investigación Speech Interactive Research Group del Departamento de Electrónica y Electricidad de la UPV/EHU (coordinador del proyecto), profesionales de Osakidetza, concretamente del Instituto de Investigación Sanitaria Bioaraba, profesionales de Osatek, el Servicio Público de Teasistencia betiON y la Universidad de Oslo.

También participa el Institut Mines-Télécom de Francia, especialista en reconocimiento facial; el Instituto Technion de Israel, que cuenta con una neurocientífica capaz de detectar cambios emocionales en el ojo; la Universidad de Nápoles, que alberga un grupo mixto compuesto por gente de ciencias de la computación trabajando en un departamento de psicología; la empresa londinense Intelligent Voice, especialista en reconocimiento del habla; la empresa Acapela belga, dedicada a la síntesis de voz; Tunstall, empresa multinacional con sede en Inglaterra proveedora de productos y servicios de teleasistencia; y, finalmente, la asociación E-Seniors francesa, creada para trabajar la brecha digital en personas mayores.